La inclusión de los bosques en el mercado de carbono en su formato REDD (Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación) fue adoptada por el sistema de las Naciones Unidas a través del Programa ONU-REDD. En 2008, el Secretario General de las Naciones Unidas presentó el Programa ONU-REDD, que es llevado a cabo por tres organismos de las Naciones Unidas: la FAO, el PNUMA y el PNUD, en estrecha colaboración con el Banco Mundial.
Se trata un programa de planes y créditos para compensar las emisiones de carbono, que ha provocado rechazo entre numerosas organizaciones sociales, ambientales y de Pueblos Indígenas, quienes han denunciado la iniciativa REDD como una falsa solución al cambio climático.
El Foro Internacional de los Pueblos Indígenas sobre Cambio Climático ha declarado que: “REDD no beneficiará a los Pueblos Indígenas sino que, de hecho, provocará más violaciones de los Derechos de los Pueblos Indígenas. …nos robará nuestra tierra, provocará desplazamientos forzados, impedirá el acceso y pondrá en riesgo las prácticas agrícolas indígenas, destruirá la diversidad biológica y la diversidad cultural y provocará conflictos sociales. En el marco de REDD, los Estados y los comerciantes de carbono tendrán mayor control sobre nuestros bosques”.
El propio Documento Marco del Programa ONU-REDD previene que el programa podría erosionar prácticas de conservación sin fines de lucro, basadas en valores culturales, así como marginar a los sin tierra y a quienes tengan derechos comunales de uso.
Pero los mercaderes del carbono avanzan rápido. Australia e Indonesia anunciaron que están trabajando en dos proyectos REDD de comercio de carbono por un valor de 200 millones de dólares que utilizarían los bosques de Asia y el Pacífico para compensar las emisiones de la industria local. Planean presentarlos en las negociaciones sobre Cambio Climático que se celebrarán en diciembre de 2009 en Copenhague, Dinamarca.
Sin embargo, tan rápido como ellos las organizaciones trabajan para desenmascarar la iniciativa REDD, calificada de CO2lonialismo de los Bosques, y los pueblos organizados se pronuncian.
En un reciente comunicado, emitido desde Puyo, Ecuador, el pasado 3 de agosto (2), la Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonía Ecuatoriana (CONFENIAE) se pronunció en contra de todo tipo de negociaciones ambientales sobre los bosques advirtiendo que “toda política y actividad extractiva y de negociación de los bosques y biodiversidad en nuestros Territorios Ancestrales causará inimaginables implicaciones, entre ellas la extinción de la identidad de las Naciones Ancestrales, la pérdida del control y el manejo de nuestros territorios, que pasarían a ser manejados por el Estado, países extranjeros, transnacionales, negociadores de REDD o comerciantes de Carbono, todo lo cual devendría en miseria, hambre y pobreza extrema nunca antes vistas, tal como ahora ocurre con nuestros hermanos indígenas en la Amazonia norte del Ecuador por intereses geopolíticos, económicos y comerciales”.
En función de eso resuelve que “no negociará ni dialogará sin consentimiento de sus bases, sobre temas de negociaciones para Actividades Extractivas Petroleras, Mineras, Hidroeléctricas, Plan Socio Bosque, negocios REDD, Servicios Ambientales, etc, ya que ciertos organismos, como la institución Energía Ambiente y Población, Banco Mundial y los Mercaderes de Carbono, conjuntamente en alianza con los gobiernos Latinoamericanos, pretenden negociar sobre la vida de las Nacionalidades y Pueblos Indígenas afectando nuestros Derechos Territoriales”.
Argumentan que su rechazo a los proyectos REDD es porque “pretenden quitarnos el libre manejo sobre nuestros recursos y porque además no son una solución definitiva al problema del cambio climático, al contrario, solo lo empeora”.
En cambio, una propuesta genuina, enunciada en “Una Guía para los Pueblos Indígenas. Falsas soluciones al cambio climático” (3), sería honrar a la Tierra y el Cielo, lo cual implicaría:
•Recortar drásticamente las emisiones en el lugar de origen
•Cambiar a modelos sustentables de producción, consumo y desarrollo
•Promover un Cambio de Paradigma
--- Dar prioridad al planeta y a los pueblos, no a las ganancias
--- Liderazgo ético en lugar de corrupción y ladrones
--- Honrar a la Tierra y al Cielo y respetar la ley de la Naturaleza
--- Dejar los combustibles fósiles en el subsuelo
--- Rápidamente dejar de explorar y explotar los combustibles fósiles
--- Terminar con los subsidios de $200 mil millones/año de carbón y petróleo
•Promover energías renovables
•Promover soluciones locales de energía
•Reducir, reutilizar, reciclar
•Retirar paulatinamente las industrias extractivas
•Reorientar los gastos militares; parar la guerra; promover la paz.
•Pagar la deuda ecológica y cancelar la deuda externa para canalizar recursos para responder al cambio climático
•Promover la soberanía de los pueblos sobre energía, bosques, tierra y agua
•Practicar la conservación y manejo de recursos naturales con un enfoque de derechos humanos
•Implementar la Declaración de la ONU sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas
•Demarcar y proteger los territorios de los Pueblos Indígenas
•Dejar de deforestar y abordar sus causas subyacentes
•Promover la soberanía y la seguridad alimentaria
•Promover la agricultura sustentable de pequeña escala y la agricultura biológica
•Promover el transporte público
•Luchar por la Justicia Climática
(1) Citado en el documento informativo del FPP: “Algunas opiniones de organizaciones de pueblos indígenas y organizaciones vinculadas a los bosques acerca del “Fondo cooperativo para el carbono de los bosques” y propuestas para una ‘Alianza Forestal Mundial’”,http://www.forestpeoples.org/documents/forest_
issues/fcpf_ip_survey_feb08_sp.pdf
(2) “Ecuador: CONFENIAE rechaza negociaciones ambientales y políticas extractivas”, Servindi, http://www.servindi.org/actualidad/14994
(3) “Una Guía para los Pueblos Indígenas. Falsas soluciones al cambio climático”,http://www.earthpeoples.org/CAMBIO_CLIMATICO/
Guia_Pueblos_Indigenas-ESPANOL.pdf