Entre 6.000 y 7.000 indígenas y miembros de otras comunidades, corren el riesgo de ser expulsados del bosque Embobut, situado en los montes Cherangany del condado de Elgeyo Marakwet, Kenya.
Desde hace muchos años el gobierno ha estado intentando desalojar de sus tierras a los habitantes indígenas de Embobut incendiando sus casas, para una pretendida conservación excluyente, que implica el desplazamiento de la población local.
Hace poco, el presidente prometió a los que denominó “desalojados” una pequeña suma de dinero por familia para que abandonaran el bosque. Sin embargo, los habitantes indígenas se negaron a irse y ahora corren el riesgo de ser expulsados de su territorio ancestral y privados de sus propios medios de subsistencia, que son parte integrante de su vida en el bosque y de su identidad, de sus fuentes de alimentos característicos, agua, salud y abrigo, y de su supervivencia cultural como pueblo.
La organización Forest Peoples Programme (FPP) ha lanzado un llamamiento al gobierno y al parlamento de Kenya, así como a los órganos pertinentes de la ONU, para evitar que las comunidades indígenas y otros habitantes de Embobut sean expulsados, lo cual violaría sus derechos humanos y la legislación internacional.
Para firmar esta acción:
https://secure.avaaz.org/en/petition/Government_of_Kenya_Stop_forceful_and_illegal_eviction_
of_SengwerCherangany_communities, y ver el llamamiento en
http://www.forestpeoples.org/topics/rights-land-natural-resources/news/2013/12/urgent-appeal-
against-forced-eviction-sengwercher