Semillas de esperanza
“¿Cuáles son las soluciones a la destrucción de los bosques?” “¿Qué alternativas propones?” Preguntas como estas son las que se suelen plantear para anular posibles debates que conduzcan hacia soluciones reales a la deforestación y el caos climático. Sin embargo, los caminos a hacia esas soluciones tendrían que comenzar por poner fin a la embestida contra los pueblos de los bosques y sus formas de vida, y por aprender sobre sus relaciones con sus territorios. Esas comunidades han vivido en y con los bosques y los han protegido por generaciones.
Después de la cancelación de la mega represa de Baram en 2016, los habitantes de Long Liam, quienes estaban entre los miles que se opusieron a la construcción de la mega represa, unieron fuerzas para instalar la tan ansiada fuente de energía para su comunidad
El WRM entrevistó al activista Nasako Besingi. Él organizó comunidades en protesta contra las plantaciones de palma de la empresa Herakles Farm. Ha sufrido ataques, intimidación y criminalización por parte de la empresa y el gobierno. (Disponible en suajili).
Sólo disponible en francés.
Los y las campesinas y otras personas que trabajan en las zonas rurales se encuentran a un solo paso de lograr una Declaración de las Naciones Unidas que podría defender y proteger sus derechos a la tierra, las semillas, la biodiversidad, los mercados locales y mucho más.
Con la adhesión de organizaciones en los cinco continentes, se difunde una declaración abierta que denuncia el fracaso de la RSPO en eliminar la violencia y la destrucción que generan los monocultivos de palma aceitera.
El sistema de certificación de la RSPO permite la expansión de la industria de la palma aceitera a la vez que maquilla de verde la destrucción y las violaciones a los derechos humanos cometidas por estas empresas.