El organismo de certificación Mesa Redonda sobre el Aceite de Palma Sostenible (RSPO) no ha tomado medidas contra una compañía que intenta obtener el sello RSPO pero que ha arrasado cultivos y bosques pertenecientes a la comunidad indígena de Muara Tae, con la ayuda de policías armados llamados para intimidar a la población y proteger a la empresa.
PT Borneo Surya Mining Jaya (PT Borneo), una filial de First Resources Ltd., afirmó falsamente que había obtenido el consentimiento de las comunidades locales para una plantación de palma aceitera en sus tierras de Kutai Barat, Kalimantan oriental, y que había realizado una Evaluación de Impacto Ambiental, como le correspondía por ser miembro de la RSPO. Sin embargo, la Agencia de Investigación Ambiental (EIA), con base en Londres, presentó una queja contra la RSPO el 17 de octubre de este año, donde señala que First Resources había infringido los Principios y Criterios así como el Nuevo Procedimiento sobre Plantaciones de dicho organismo.
Según sus propias directivas, la RSPO debería haber determinado si el reclamo era legítimo, dentro de las dos semanas siguientes a su presentación al Comité de Reclamaciones. El reconocimiento de la legitimidad de dicha reclamación habría obligado a First Resources a dejar de operar en Muara Tae hasta que el litigio se resolviera. Sin embargo, la secretaría de la RSPO aún no lo ha hecho, y tampoco ha informado a la EIA sobre la fecha en la que tomará la decisión, si bien recibió el reclamo hace tres semanas.
La comunidad rechazó en varias ocasiones la plantación propuesta, pero esa decisión ha sido ignorada por completo. De hecho, al mismo tiempo que ofrecía la posibilidad de un diálogo en Singapur a Masrani, el jefe de la aldea, First Resources se disponía a arrasar las tierras de su padre (ver referencia a la película Manufacturing Consent en la sección Recomendados).