La sociedad de Laos vive actualmente un proceso de profunda reestructuración. A lo largo de la última década el gobierno de Laos ha desplazado a decenas de miles de Pueblos Indígenas de sus remotos hogares en las montañas para reasentarlos en zonas bajas y cercanas a las carreteras. Mientras que los objetivos de los programas gubernamentales son el “desarrollo” y la “reducción de la pobreza”, los impactos que sufren las comunidades reasentadas en cuanto al sustento, la seguridad alimentaria y el medio ambiente de han sido a menudo devastadores.
“Decenas de miles de personas vulnerables de las minorías étnicas indígenas han sufrido y muerto debido a los impactos asociados a las iniciativas de reasentamiento interno mal concebidas y mal instrumentadas en Laos a lo largo de los últimos diez años”, escriben Ian Baird y Bruce Shoemaker en un informe reciente sobre el reasentamiento en Laos.
El informe, que lleva por título "Aiding or Abetting? Internal Resettlement and
International Aid Agencies in the Lao PDR" [¿Ayuda o incitación? El reasentamiento interno y las agencias de ayuda internacional en la República Democrática Popular de Laos], es una crítica a la respuesta de muchas agencias internacionales de ayuda a los problemas provocados por el reasentamiento.
Baird y Shoemaker, quienes han trabajado en Laos durante muchos años, se preguntan si algunos organismos de ayuda no están en efecto “facilitando las violaciones de los derechos básicos de las comunidades afectadas a través de su apoyo al reasentamiento interno”.
Los problemas provocados por el reasentamiento interno en Laos están bien documentados. En 1997 el antropólogo francés Yves Goudineau encabezó un equipo de investigadores que documentó tasas de mortalidad de hasta un 30% en las comunidades de montaña que habían sido reasentadas. El informe fue publicado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). En el año 2000 el Banco Asiático para el Desarrollo patrocinó una Evaluación Participativa de la Pobreza dirigida por el antropólogo James Chamberlain. Esta evaluación reveló que muchos aldeanos creen que su pobreza es de creación reciente y debida en gran parte a los programas gubernamentales que implican el reasentamiento. El informe declara que al reducir la agricultura itinerante el gobierno de Laos no ha reducido la pobreza sino que en realidad la ha aumentado.
Baird y Shoemaker enumeran otros 18 estudios realizados por ONGs, organismos de la ONU y académicos que confirman los impactos sobre las comunidades reasentadas de Laos. “Que sepamos, no hay un solo estudio que informe que el reasentamiento ha beneficiado a las comunidades étnicas indígenas de Laos”, escriben.
Algunas organizaciones como la Agencia Sueca para la Cooperación Internacional para el Desarrollo, Concern Worldwide y Canada Fund, resisten activamente los nuevos reasentamientos en Laos trabajando, por ejemplo, en aldeas remotas de montañas y demostrando así que hay alternativas al reasentamiento.
Otros, sin embargo, están promoviendo activamente el reasentamiento. Finn Reske-Nielsen, representante residente del PNUD en Laos, parece no darse cuenta de las pruebas que aparecen en informes publicados por su propia organización en relación con los impactos sobre las comunidades reasentadas. Su argumento es que “el reasentamiento voluntario tiene sentido en un país tan poco poblado como Laos, donde resulta difícil acercar a las personas la educación, la salud y otros servicios esenciales”.
Baird y Shoemaker señalan que el reasentamiento en Laos no tiene nada de inevitable: “Se está imponiendo a las comunidades mediante una combinación de políticas y acciones específicas en lo político, lo social y lo ambiental”. Algunas agencias de ayuda como ADB exigen que el reasentamiento logre sus objetivos a largo plazo. “La integración regional, la promoción de la forestación industrial y los cultivos comerciales y la apertura de mercados exigen el tipo de cambios demográficos en el Laos rural que el reasentamiento interno está ayudando a concretar”, afirman Baird y Shoemaker.
En 2004 Sandro Cerrato, el jefe de la misión de la Unión Europea en Vientiane, elaboró un documento conceptual que exhortaba a un nuevo diálogo sobre reasentamiento entre los grandes organismos de ayuda y el gobierno de Laos. Cerrato propone que las agencias de ayuda apoyen el reasentamiento para poder hacerlo mejor.
Baird y Shoemaker señalan que algunas organizaciones han criticado el documento conceptual de Cerrato por fundarse en una serie de falsas premisas. Cerrato supone que el reasentamiento disminuirá la pobreza. De hecho, según los autores el reasentamiento ha “contribuido a la pobreza a largo plazo así como a la degradación del medio ambiente en las zonas de montaña y en las tierras bajas, la alienación cultural y el aumento de los conflictos sociales”.
Cerrato supone que las agencias de ayuda pueden distinguir entre reasentamiento voluntario e involuntario. Pero en el contexto de Laos es difícil notar la diferencia, alegan Baird y Shoemaker: “prácticamente todo lo que se clasifica como reasentamiento voluntario en Laos, en realidad, no surge como una iniciativa de las aldeas”.
Cerrato supone que el reasentamiento es inevitable y que las agencias de ayuda no pueden proponer alternativas. Supone que más dinero y una mejor instrumentación mejorarían de algún modo el reasentamiento, aunque no hay pruebas que lo respalden. Ignora el hecho de que las comunidades de las montañas tienen derecho a decidir su propio futuro y supone que no son capaces de hacerlo.
Los organismos de ayuda internacional operan en Laos sin mucha necesidad de rendir cuentas públicamente. No se enfrentan al examen de los medios de comunicación controlados por el Estado. Las agencias internacionales de ayuda rara vez tienen que justificar sus políticas o acciones ante las comunidades o instituciones locales. No necesitan preocuparse por grupos locales de observación o “guardianes” ni por la posibilidad de demandas legales cuando sus acciones terminan perjudicando a las comunidades locales
Aunque Cerrato parece ignorar la gran cantidad de investigaciones sobre los impactos del reasentamiento en Laos, es inaceptable que la UE alegue que no es consciente de las consecuencias potenciales de apoyar nuevos reasentamientos en este país. Baird y Shoemaker señalan que todavía no queda claro el modo en que se desarrollará la iniciativa de la UE. Pero si ésta sigue adelante con la estructura actual, la UE podría percibirse como cómplice activo en la violación de los derechos humanos de las comunidades étnicas de las zonas de montaña de Laos.
"Aiding or Abetting? Internal Resettlement and International Aid Agencies
in the Lao PDR", de Ian Baird y Bruce Shoemaker, fue publicado por Probe
International y está disponible en:
http://www.probeinternational.org/pi/documents/mekong/AidingOrAbetting.pdf.
Por Chris Lang, correo-e: http://chrislang.org