Compartimos a continuación la carta enviada por Acción Ecológica agradeciendo todo el apoyo recibido a nivel internacional. Destacamos que, aún cuando Acción Ecológica permanece abierta, las normas que permitieron a dos Ministerios disponer su cierre siguen vigentes.
Sabemos que Acción Ecológica no va a renunciar a su compromiso con la defensa de los derechos de las comunidades y de la naturaleza con el fin de asegurar la preservación de un ambiente sano y alcanzar los derechos del buen vivir. Por lo tanto, el riesgo para Acción Ecológica sigue latente. En cualquier momento el gobierno puede aludir nuevamente e injustamente que la organización se sale de sus estatutos o reiterar su acusación de que Acción Ecológica incita a la violencia. Es por ello que seguiremos alerta ante cualquier novedad o necesidad de reactivar las acciones a nivel internacional.
Por otra parte, los conflictos en la Cordillera del Cóndor, en territorio Shuar, aún persisten. Mucho queda por hacer para frenar los abusos de empresas extractivistas transnacionales sobre territorios indígenas y campesinos, y el rol de Acción Ecológica en Ecuador es fundamental para este proceso.
Queremos hacer una declaración publica de agradecimiento a las millares de cartas, abrazos y mensajes recibidos desde todos los rincones del mundo. Hemos logrado un resultado para muchos inesperado: el gobierno del Ecuador ha resuelto desistir de su intento de cierre de Acción Ecológica.
Hemos sabido (entre ustedes y nosotros) defender nuestro derecho a la solidaridad, a la participación y a la denuncia contra las agresiones a la naturaleza. Aunque resulte extraño tener que celebrar esto, lo hacemos, porque el riesgo de perder estos derechos se veía cercano y era aterrador.
Nuestra defensa de la naturaleza puede resultar antipática a los grupos de poder, a las empresas tranasnacionales, quizás especialmente a las chinas, pues estas empresas están extendidas en todo el territorio nacional con sus proyectos extractivos y de construcción de mega infraestructuras. Pero reconocemos que nuestra organización es también profundamente querida y respetada por comunidades y personas con quienes hemos trabajado. Puestos en la balanza, antipatía y afecto, éste pesó más.
Vivimos en un país marcado por los conflictos ambientales, conflictos por la explotación de petróleo en áreas como el Yasuní, o de minería en la Cordillera del Cóndor, o de proyectos de agrocombustibles sobre nuestros bosques secos. Un asalto a territorios en donde la naturaleza vive bajo el cuidado de sus custodios que nos convocan a la participación, a la solidaridad y a la denuncia, allí seguiremos, con nuestro aporte intelectual y político, con nuestra presencia en la calle y en la construcción de espacios de trabajo compartido para enfrentar las diferentes causas y formas de agresiones a la naturaleza.
Conforme a nuestra visión y misión, nos comprometemos a seguir trabajando para que la inteligencia respete a la Tierra y para que la Tierra respetada sustente a la humanidad.
Gracias a todos y todas, por estar ahí, por animar nuestra voz y por tocar con nosotros los tambores de la paz que queremos, con justicia y dignidad.
ACCION ECOLOGICA
Juntos somos la fiebre inextinguible, la pequeña luz que cabecea y por la llanura de la noche cruza.