La ONG india Samata y la inglesa Programa para los Pueblos de los Bosques (FPP) han descubierto que el plan de acción para la reubicación (RAP) del proyecto Andhra Pradesh Community Forest Management Project (APCFMP) financiado por el Banco Mundial lesiona los derechos consuetudinarios y el sustento de las comunidades e incurre en incumplimiento múltiple de las políticas de salvaguardia del Banco sobre Pueblos Indígenas y Reasentamiento Involuntario. La evaluación participativa, que se llevó a cabo en siete aldeas del noreste de Andhra Pradesh en noviembre de 2006, descubrió que varios problemas (identificados en un estudio anterior realizado por Samata y FPP; véanse notas al pie) de este proyecto forestal del Banco, que empezó en 2002 y debería terminar, según se prevé, a fines de 2007, no se han resuelto y en algunos casos incluso han empeorado.
El estudio concluye que las comunidades Adivasi afectadas no han podido participar en forma significativa en el diseño del plan de acción para la reubicación (RAP). Se suponía que dicho plan compensaría, en virtud del APCFMP, las penurias sufridas por las familias Adivasi que debido al proyecto anterior financiado por el Banco, el Proyecto de Manejo Forestal Conjunto (1994-2000), perdieron las tierras en los bosques, donde practicaban la agricultura itinerante.
A los aldeanos se les dijo simplemente que el Departamento Forestal tenía dinero para que los integrantes del Comité de Protección del Bosque realizaran actividades de “mejora de tierras” y “generación de ingresos” en virtud de algo llamado “RAP”. Muchas comunidades afectadas no entienden qué es el RAP ni por qué es parte del proyecto llamado “Manejo comunitario de bosques” (CFM). En dos casos, las ONG contratadas para instrumentar el RAP han explicado incorrectamente a los aldeanos que la ayuda del RAP es un préstamo que deberán reintegrar total o parcialmente. En el poblado de Chapariguda, distrito de Shrikakulam, por ejemplo, parece que una ONG encargada de instrumentar el RAP recogió injustamente dinero de dieciocho familias Savara prometiéndoles que mediante dicho pago obtendrían los beneficios del plan RAP. Once meses después, los aldeanos todavía no han vuelto a ver al personal de la ONG ni se han enterado de si su aldea fue o no incluida en el plan de compensaciones por el Departamento Forestal de Andhra Pradesh (APFD).
No se informó correctamente a los aldeanos indígenas Adivasi acerca de sus derechos. En varios poblados visitados por Samata y el FPP, las personas advirtieron que las ONG los habían presionado para que firmaran cartas de consentimiento con el fin de recibir las 25.000 rupias por familia “autorizadas”:
El hombre de la ONG recogió las firmas y las impresiones digitales de todas las personas. Dijo: “Firmen aquí para recibir el beneficio de las 25.000 rupias. Ahora no hay dinero de los VSS (Vana Samrakshana Samithi, Comités de los poblados encargados de la protección de los bosques), de modo que tienen que firmar el documento para recibir el beneficio del RAP”. Nos dijo que las mujeres recibirían saris y los hombres, telas. Se llevó 200 rupias de cada familia, que según él eran necesarias para recibir la ayuda del RAP. ¡Dieciocho familias pagaron a este hombre ese dinero! [Familias Savara durante una reunión en la aldea de Chapariguda, noviembre de 2006]
Le preguntamos al hombre de la ONG por qué estaba recogiendo nuestras firmas. Nos respondió: “El Departamento Forestal ha aprobado la suma de 25.000 rupias por familia. Recibirán todo eso en materiales. Para ello, solamente tienen que firmar”. No nos explicó nada sobre compromisos legales de dejar nuestra tierra en los bosques... Si hubiéramos entendido que nos estábamos comprometiendo legalmente a no volver a la agricultura podu (itinerante), nunca hubiéramos firmado. [Aldeanos Adivasi, división de Narseepatnam, distrito de Vishakhapatnam, Andhra Pradesh]
Contrariamente al contrato de préstamo del proyecto, en ninguna de las aldeas visitadas se hicieron estudios detallados con cada familia para evaluar qué dificultades o costos monetarios y no monetarios han sufrido en los últimos diez años tras haber perdido las tierras que utilizaban para la agricultura itinerante. Las ONG locales se han quejado de que la suma fija de compensación establecida en el RAP es injusta e imprecisa, pero el Departamento Forestal ha desestimado dichas quejas.
Existen signos preocupantes de que en algunas aldeas las familias que perdieron sus tierras por culpa del anterior proyecto forestal del Banco también están siendo excluidas de la compensación del RAP, lo que contraviene directamente el contrato de préstamo. En la aldea de Sagara, en un Área del Quinto Programa [disposición constitucional referida a la protección de ciertas zonas y de los derechos tribales] del distrito de Vishakhapatnam, por ejemplo, familias que fueron obligadas a dejar sus tierras de agricultura itinerante (podu) en los bosques en virtud del proyecto de manejo conjunto de bosques (JFM) financiado por el Banco Mundial en la década de 1990 alegan que se las ha excluido de la ayuda del RAP. Según dirigentes de la aldea, no se invitó a estas familias a las reuniones del RAP y los funcionarios del APFD han ordenado que solamente aquellas familias que ya poseen tierras patta (de agricultura permanente) pueden acceder a la compensación por los daños causados por el proyecto anterior del Banco.
Los dirigentes de las comunidades y las ONG que los apoyan señalan que el proyecto entero CFM está desactualizado porque socava las medidas actuales del gobierno tendientes a avanzar en algo hacia el reconocimiento de los derechos consuetudinarios sobre los bosques en virtud de la recientemente sancionada Ley de Reconocimiento de los Derechos sobre los Bosques (de Tribus Registradas y otros habitantes tradicionales de los bosques) (2006). En vista de lo inadecuado del RAP y de los graves defectos de su diseño (sin olvidar el nivel arbitrario de la -suma fija de- compensación), una cantidad creciente de aldeas se está negando a participar del RAP. Muchas ONG locales también se están negando a instrumentar el plan de realojamiento.
Al acercarse la fecha de cierre del proyecto (fines de 2007) los aldeanos, como por ejemplo los de la aldea Gorapadu en el distrito de Srikakulam, protestan porque el proyecto APCFM financiado por el Banco Mundial sigue sin ser transparente e implica menos participación de la comunidad que el proyecto anterior del mismo Banco. Las autoridades de la aldea tuvieron que apelar a la Ley de Libertad de Información para obtener información sobre el uso de los fondos del proyecto por parte del Departamento Forestal y lo que descubrieron confirma sus temores en cuanto a la corrupción. Las ONG locales que hace tiempo se retiraron del proyecto CFM dicen que no se dejarán engañar la próxima vez que el Banco prometa un enfoque participativo del manejo de los bosques:
La primera vez que oímos hablar del proyecto CFM pensamos que la “comunidad” sería central y que las comunidades podrían controlar las tierras boscosas. Creímos que el proyecto CFM sería un buen alimento, como el recipiente de calabaza para el ghee, lleno de rica mantequilla aclarada. Pero cuando bebimos de este recipiente descubrimos que su contenido no tenía sabor. Allí no hay ningún alimento. No hay “comunidad” en el CFM. Se le ha quitado todo lo bueno. [Sanjeeva Rao, Asociación Velugu, noviembre de 2006]
Ahora las autoridades de las aldeas y las ONG de apoyo están llevando sus quejas sobre el RAP y el proyecto APCFM en general a las agencias de instrumentación y a los órganos supervisores “independientes”. Sin embargo, a esta altura las comunidades tienen pocas esperanzas de obtener una compensación auténtica por los problemas causados por las intervenciones forestales del Banco tanto pasadas como presentes. Todo parece indicar que una vez más el APFD negará los problemas causados por el proyecto y desestimará las legítimas quejas de las comunidades en tanto infundadas o “mal informadas”.
Por Tom Griffiths, Programa para los Pueblos de los Bosques,
correo-e: tom@forestpeoples.org.
Más información: Ravi Rebbapragada y Bhanu Kalluri, samatha@satyam.net.in, Tom Griffiths, tom@forestpeoples.org. Un artículo más detallado disponible en inglés en: Griffiths, Tom (2006), Going from bad to Worse: World Bank forestry project in Andhra Pradesh fails Adivasi communities,
http://www.forestpeoples.org/documents/ifi_igo/wb_andhra_pradesh_dec06_eng.shtml
Por estudios anteriores sobre este mismo proyecto del Banco Mundial,véase: Griffiths, T, Rebbapragada, R y Kalluri, B (2005), “El gran negocio del "manejo comunitario de bosques" en India: evaluación crítica de un proyecto financiado por el Banco Mundial en Andhra Pradesh”, boletín Nº 93 del WRM, http://www.wrm.org.uy/boletin/93/Asia.html#India
Véase también: FPP y Samata (2005), Andhra Pradesh Community Forest Management Project – A preliminary independent evaluation of a World Bank forestry project,
http://www.forestpeoples.org/documents/ifi_igo/wb_andhra_
pradesh_cfm_proj_may_05_eng.pdf.