El pasado mes de noviembre recibimos un mensaje de la ONG Native Forest Network-Southern Hemisphere - NFN (Red Bosque Nativo - Hemisferio Sur), que tiene su sede en Tasmania, donde se nos informaba que el gigante australiano North Ltd. está planeando invertir en plantaciones para pulpa en el Uruguay.
Tim Cadman, portavoz de NFN, señalaba que dicha empresa -responsable en su propio país de la tala de extensas áreas de bosques nativos de eucalipto- actúa de manera totalmente desconsiderada y no repara en los derechos de la gente frente a su avidez de obtener ganancias. Asimismo informaba que North Ltd. cada tanto realiza donaciones de dinero a los más importantes partidos políticos australianos y que ejerce una enorme influencia en el estado de Tasmania, donde ha depredado bosques primarios de eucalipto y porciones de selva tropical para sustituirlos por plantaciones de pino. Incluso una vez que han cortado los bosques e instalado las plantaciones, el manejo forestal practicado por la empresa es completamente insustentable. Además de provocar impactos en la geomorfología, tales como el colapso de laderas enteras adyacentes a sus plantaciones, y la colmatación y cambio de cauce de los ríos, la empresa utiliza grandes cantidades de herbicidas y otros productos químicos para controlar la flora y la fauna, preparando así el medio ascéptico que requieren los plantines. Tales acciones motivaron en 1996 un llamado por parte de ONGs australianas a "no comprar, comercializar, vender o invertir en empresas asociadas con la transformación en astillas de los bosques nativos".
A raíz del mensaje de Tim Cadman, contactamos a la prensa local y el día 25 de noviembre se publicó un artículo en un semanario de amplia difusión en Uruguay, advirtiendo a la opinión pública del país acerca de este tipo de iniciativas, que la Ley Forestal vigente todavía sigue promoviendo. Dicho artículo fue publicado tres días antes de las elecciones presidenciales, lo que fue considerado muy oportuno, ya que uno de los candidatos es proclive a profundizar el actual proceso de promover inversiones en el sector forestal por parte de compañías multinacionales. A su vez se envió una copia del artículo a Tim Cadman, quien lo está divulgando en su país.
La oposición al modelo de monocultivos forestales a nivel local es muy importante, pero también resulta crucial el apoyo a la misma a nivel internacional. Ello implica compartir información y hacer trabajo de redes entre ONGs y personas preocupadas en el Norte y el Sur. El caso al que acabamos de referirnos así como, por ejemplo, la labor desarrollada por las ONGs escandinavas que están monitoreando las actividades de las agencias y empresas de sus propios países, son tan sólo dos ejemplos de acción coordinada para oponerse al modelo y fortalecer así la red de resistencia a nivel mundial.
Fuente: Tim Cadman, NFN, 24/11/99;