En relación con la 12ª Conferencia de las Partes del Convenio Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático realizada en Bali, Indonesia, en diciembre de 2007, en el boletín Nº 125 del WRM publicado el mes pasado advertimos que algunas decisiones de la Junta Ejecutiva del Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL) podrían atraer al Mecanismo más proyectos de plantaciones. Entre estas decisiones se cuentan la remoción de las restricciones que impiden que se brinde un incentivo perverso a la tala de bosques para sustituirlos con monocultivos patrocinados por el MDL y el aumento de la extensión de los proyectos de plantación de árboles que pueden presentarse al MDL con trámites simplificados y menos requisitos de evaluación de los impactos sociales y ambientales.
La tendencia anunciada parece estar llegando a Zimbabue.
Las últimas noticias publicadas en el periódico The Herald el 11 de enero de 2008 anuncian que “el gobierno de Zimbabue comenzó a recibir consultas de parte de inversores en países industrializados que desean acumular créditos de emisiones de gases de efecto invernadero según el Protocolo de Kioto del Convenio Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, anunció esta semana un funcionario”.
Según el periódico, la fuente declaró que “Los inversores expresaron interés en instrumentar proyectos de forestación y reforestación en zonas como Murehwa, Mutoko y Uzumba-Maramba-Pfungwe en la provincia de Mashonaland Central”.
El 6 de diciembre del año pasado el Parlamento de Zimbabue aprobó por unanimidad la ratificación del Protocolo; las consultas empezaron a llegar antes de la ratificación y siguieron llegando después.
El gobierno de Zimbabue parece estar completamente comprometido con el comercio del carbono y entusiasmado con las divisas que podrá ganar a corto plazo con la entrega de grandes extensiones de tierras para las plantaciones de árboles exóticos e indígenas que se venderán como créditos de carbono. The Herald informa que una tonelada de dióxido de carbono ahorrado hoy se vende a un precio de entre cinco y siete euros.
Tales cálculos monetarios han demostrado ser un error para los pueblos cuyo sustento depende de la tierra y el agua. Lamentablemente, si no impedimos que los monocultivos de árboles sigan inundando las tierras agrícolas, los bosques y humedales, demostrarán que también son un error para el planeta entero en un futuro no muy lejano.
(1) 'Country to Reap Investment From Protocol', The Herald (Harare), 11 de enero de 2008, http://allafrica.com/stories/200801110193.html