Indonesia tiene algunos de los bosques tropicales más biodiversos del mundo pero también la tasa de deforestación más alta. El concepto de “bosques de alto valor de conservación” (BAVC) ha prendido en Indonesia como medio de reconciliar la presión económica para abrir zonas boscosas con la necesidad de reducir el ritmo de la pérdida de bosques.
Varias ONG han fomentado activamente el uso de este concepto, integrándolo a su continuado trabajo de conservación, manejo sustentable de bosques y manejo del uso de la tierra, en colaboración con ministerios gubernamentales, el sector privado y comunidades locales. En lo que a muchos respecta, el objetivo urgente de la aplicación del concepto es ayudar a prevenir la conversión de bosques y la pérdida de la biodiversidad y los valores sociales que la acompaña.
La evaluación BAVC representa un concepto embrionario presentado y promovido por el Consejo de Manejo Forestal (FSC), pensado en su origen para Unidades de Manejo Forestal específicas y ahora adoptado más ampliamente, por ejemplo por la Mesa Redonda sobre Palma Aceitera Sustentable (RSPO). La premisa básica es que todas las zonas boscosas tienen valores biológicos, ambientales y sociales con atributos de conservación identificables. Si se identifican estos atributos, la administración debería garantizar el mantenimiento o la mejora de los Altos Valores de Conservación (AVC) que estos atributos de conservación describen.
El manual indonesio para BAVC de 2003 fue la primera versión nacional que se produjo, y varias ramas del gobierno estudian en la actualidad cómo integrar los BAVC a los procesos de planificación y las políticas gubernamentales existentes. Si esta integración sigue adelante, ayudará a armonizar las decisiones gubernamentales sobre el uso de tierras con la demanda de los mercados internacionales de productos de papel “libres de BAVC” y aceite de palma producido en forma sustentable.
Hasta el momento, el trabajo sobre BAVC en Indonesia ha incluido una cantidad considerable de evaluaciones de BAVC a nivel de concesiones de empresas de celulosa, aceite de palma y madera, entre las que se cuentan más de una docena en Sumatra y un puñado en Kalimantan. El WWF (en Sumatra, Kalimantan y Papúa), The Nature Conservancy (en Kalimantan Oriental), Tropenbos (Kalimantan Oriental), Flora and Fauna International (Kalimantan Occidental) y Sumatran Orangutan Conservation Programme (Sumatra del Norte & Aceh) han estado trabajando con empresas y gobiernos locales para determinar, manejar y supervisar los BAVC dentro de las plantaciones y concesiones madereras.
También se han iniciado varias evaluaciones de BAVC a nivel de territorio, por ejemplo:
La región del Trans-fly en la parte meridional de la provincia de Papúa, donde la evaluación de BAVC identificó zonas prioritarias de conservación e importantes zonas sociales y culturales indígenas y ayudó al WWF a influir en el gobierno local para incorporar esto a su proceso de planificación;
La provincia de Riau, en Sumatra, donde una tosca evaluación de BAVC fue la base de las negociaciones para lograr la conservación de los pocos grandes bloques de bosque intacto restantes, tales como el complejo de Tesso Nilo;
La provincia de Kalimantan Occidental, en Kalimantan, donde la evaluación de BAVC brindó los argumentos para que el WWF y otras ONG sostuvieran las zonas boscosas restantes y protegieran el ‘corazón de Borneo’.
El análisis territorial para BAVC se hace principalmente mediante la generación de mapas y el análisis espacial. En los casos de Papúa y Kalimantan Occidental, las evaluaciones de BAVC a nivel del territorio han sido fortalecidas por los esfuerzos para reconocer e incorporar valores sociales y culturales. Esta parte de la evaluación se llevó a cabo a través de una serie de reuniones de consulta y un taller con profesionales de las ciencias sociales y representantes de comunidades indígenas.
En el caso de las plantaciones madereras, el WWF ha estado instando a las empresas de la celulosa y el papel APP y APRIL a proteger los BAVC en sus concesiones de Riau, Sumatra. En respuesta, APP se comprometió aparentemente a proteger el BAVC encontrado en una de sus concesiones y encargó a Smartwood la identificación de BAVC en tres de sus otras unidades de manejo forestal de la zona. Basándose en estos mapas, APP anunció que protegería los BAVC identificados y firmó un acuerdo con Smartwood para el seguimiento de su forma de manejar los BAVC durante los próximos cinco años. Sin embargo, informes de supervisión recientes demuestran que APP no ha protegido dichas zonas de los incendios, el madereo ilegal y más conversión de los bosques a pesar de sus promesas anteriores.
Por su parte, APRIL llevó a cabo sus propias evaluaciones de BAVC en varias de sus unidades de manejo forestal, con apoyo de peritos locales e internacionales. APRIL también encargó a ProForest la realización de evaluaciones adicionales de BAVC. Además, la empresa prometió que no convertiría ningún BAVC identificado mediante la aplicación del manual indonesio en sus nuevas concesiones y que no compraría madera procedente de BAVC en cualquier lugar del mundo para sus fábricas de celulosa. No obstante, en abril de 2006 una investigación descubrió que se estaba talando un bosque en una concesión asociada con APRIL, perturbando el hábitat de los elefantes.
Con respecto a las concesiones de palma aceitera, tres de las principales productoras de aceite de palma de Indonesia, PT SMART Tbk., PT Astra Agro Lestari Tbk. y PT London Sumatra Tbk., han firmado memorandos de entendimiento con el WWF para iniciar evaluaciones piloto de BAVC en algunas de sus concesiones. Las empresas han acordado instrumentar las prescripciones relativas a la protección y el manejo que surgen del trabajo de BAVC y aplicar lo aprendido en este ensayo piloto en sus otras concesiones en todo el país. Sin embargo, todavía está por verse la efectividad de la aplicación del concepto de BAVC en este sector.
La aplicación general del concepto de BAVC en Indonesia sigue planteando desafíos clave, entre los que se cuentan:
La primera versión del manual de BAVC de Indonesia fue desarrollada por un grupo relativamente pequeño de profesionales y peritos interesados. Desde entonces se ha ganado mucha experiencia en BAVC y se han involucrado muchos más interesados. Ahora el desafío es hacer participar un grupo mayor de interesados en el proceso de fortalecer el manual basándose en esta experiencia, con inclusión de un análisis social y cultural más fuerte y las lecciones aprendidas con la experiencia de la palma aceitera;
Es necesario seguir usando los resultados de la evaluación de BAVC a nivel provincial y de territorio para influir en la planificación gubernamental de desarrollo y uso de tierras, por ejemplo mediante la demarcación de dichos bosques en la planificación espacial provincial o de distrito;
Los casos de las empresas de la celulosa y el papel y de la palma aceitera subrayan la necesidad de la administración activa de los BAVC para que los compromisos de las empresas hagan una diferencia real en la práctica.
Artículo compilado y reescrito por Fitrian Ardiansyah de WWF-Indonesia (fardiansyah@wwf.or.id), basado en varios artículos sobre los BAVC escritos por WWF-Internacional y WWF-Indonesia.