Segundo Foro Mesoamericano contra las Represas

Imagen
WRM default image

Del 17 al 20 de julio se desarrolló en Honduras el Segundo Foro Mesoamericano contra las Represas: "Por el Agua y la Vida de los Pueblos". El evento contó con la participación de unos 150 delegados, "preocupados por la creciente invasión de proyectos de construcción de represas que vienen imponiendo las grandes transnacionales y organismos multilaterales en alianza con los gobiernos corruptos de la región Mesoamericana".

El objetivo central del Foro fue el "de compartir y analizar nuestras experiencias para fortalecer las luchas en defensa de nuestros recursos naturales, nuestra cultura, nuestros territorios y hasta nuestra propia vida, que están siendo amenazadas por la imposición de planes económicos y militares que atentan contra la autodeterminación de nuestros pueblos".

En la parte de diagnóstico, los participantes identificaron la existencia de unos 500 proyectos de represas hidroeléctricas en la región y señalaron "que la proliferación de los proyectos hidroeléctricos en nuestros países no obedece a las necesidades energéticas de nuestros pueblos sino que responde a la necesidad de crear la infraestructura necesaria para desarrollar el modelo económico neoliberal a través del Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA), los diferentes tratados de Libre Comercio a nivel continental, el Plan Puebla-Panamá y el Plan Colombia, entre otros".

Además, enfatizaron que los proyectos "se ubican en comunidades indígenas y campesinas caracterizadas por sus grandes riquezas naturales y culturales. Dichos proyectos atentan contra la sobrevivencia de nuestros pueblos y la desaparición de sus territorios".

Uno de los participantes del evento (Mauricio Alvarez, de Costa Rica), enfatizó otros resultados importantes, en particular que la reunión posibilitó el encuentro y la identificación de las personas afectadas por las represas, tanto de la región como de fuera de la misma (como de Brasil y Tailandia). Al mismo tiempo, permitió la elaboración de estrategias conjuntas, la creación de redes y el encuentro entre países, desembocando en la elaboración de planes nacionales y regionales de oposición a lo que denominó "una hidrogarquía integrada fundamentalmente por transnacionales, que se apropian de cuencas enteras de la región. Para esa hidrogarquía, lo hidroeléctrico es secundario, en tanto que el proceso de apropiación del agua legitima un mayor dominio sobre todos los demás recursos contenidos en la cuenca".

En la parte final de su declaración, el Foro exige a los gobiernos "que se detenga inmediatamente la construcción de todos los proyectos hidroeléctricos que estén en proceso de construcción y no se otorguen más concesiones de ningún cuerpo de agua a particulares. Asimismo, exigimos que se garantice y se respete el uso del agua como un bien colectivo de beneficio comunitario".

El Foro plantea en definitiva una visión opuesta y alternativa al modelo actualmente vigente, que prioriza la rentabilidad económica sobre la conservación ambiental y la equidad social, que propende a la privatización de todos los recursos y en particular del agua y la energía y su pasaje a manos de empresas transnacionales. El Foro volverá a reunirse en un año en El Salvador, donde se evaluarán las acciones llevadas a cabo de acuerdo con el Plan de Acción aprobado en la reunión que acaba de finalizar.

Artículo elaborado en base a información de: entrevista a Mauricio Alvarez, correo electrónico: oilwatch@fecon.org ; Declaración del II Foro Mesoamericano contra las Represas "Por el Agua y la Vida de los Pueblos", La Esperanza, Intibucá, Honduras, 17-20 de julio de 2003