El 7 de noviembre de 1990, Koronamoyee Sardar fue asesinada por una banda armada de asesinos a sueldo cuyo objetivo era montar una granja camaronera en el Polder 22 de Horinkhola. Los pobladores locales, dirigidos por Koronamoyee, resistieron esa fuerza invasora. En ese día fatídico Koronamoyee se convirtió en una mártir de su causa, y antes los ojos de su pueblo sigue siendo la heroína de una lucha que ya lleva diez años contra el opresor que los rodea.
El sacrificio supremo de Koronamoyee no ha sido olvidado. Cada 7 de noviembre se realiza una gran celebración en el Polder 22, donde miles de opositores se reúnen pacíficamente para conmemorar a esta valiente mujer que lideró un movimiento exitoso del pueblo contra una industria poderosa y sin escrúpulos. Actualmente el Polder 22 de Horinkhola es el único poblado sin granjas camaroneras en el distrito camaronero de Khulna. Se ganó una batalla muy importante, pero la guerra continúa.
Cuando el director del Proyecto de Acción por los Manglares (MAP por su sigla en inglés) visitó la región de los Sundarbans el mes pasado durante la última reunión del Comité Directivo de ISA Net, quedó especialmente impresionado por dos cosas: la disminución de la superficie del bosque de manglares que se considera el más grande que queda en el mundo, y por el gran coraje de la comunidad agrícola del Polder 22 de Horinkhola, cuyos habitantes han resistido firmemente por más de una década la expansión desenfrenada de la industria camaronera que rodea a su comunidad. Polder 22 parece una zona de guerra, una isla de resistencia constante en un mar tumultuoso de corrupción y avaricia industrial. El Polder 22 es el último bastión de valientes combatientes que lucharan hasta el último soldado en esta guerra sin vencedores desatada contra la Madre Tierra.
El Polder 22 de Horinkhola es una inspiración y una bendición en esta existencia terrenal que llamamos vida. Sin esa resistencia contra la tiranía abierta, qué valor tendría el futuro? El estudio de la biología indica que los tres factores principales que definen si algo esta vivo son crecimiento, movimiento e instinto de supervivencia. En el Polder 22 de Horinkhola, hemos presenciado con alegría un movimiento creciente cuya propia existencia determinará si esa comunidad sobrevive o no. Aunque la resistencia del Polder 22 es fuerte, la producción industrial del camarón también está decidida a inundar este último vestigio de tierras de cultivo tradicionales.
La pregunta es: cuanto podrán resistir, y durante cuanto tiempo recordaremos su lucha ardiendo como un fuego entre muchos fuegos?
Cita de Khushi Kabir de Nijera Kori en Bangladesh, mayo de 2001 "En el Polder 22 de Horinkhola, los mercenarios camaroneros bajo la instigación de la policía militar local dieron una paliza a tres de mis colegas. Hay mercenarios armados en la zona y estamos bajo graves presiones y amenazas. Los pobladores locales, incluso los granjeros, si bien nos apoyan, tienen mucho miedo de expresar su apoyo abiertamente. Afortunadamente los grupos sin tierra y nuestro personal permanecen con valentía en el Polder para garantizar que no se convierta en un campo camaronero"
Artículo basado en información obtenida de: Alfredo Quarto, Mangrove Action Project (MAP).