De acuerdo con información recibida del Frente Nacional por los Bosques de Costa Rica –una coalición de ONGs sociales y ambientalistas- una manifestación pacífica que se realizó el pasado 19 de febrero en el cruce de la carretera Puerto Jiménez con la Interamericana para llamar la atención al público y a la prensa sobre la grave situación de los bosques de la Península de Osa, fue violentamente reprimida por la guardia rural de la zona. La manifestación reunió a más de cien personas en defensa de los remanentes bosques de la región del Pacífico amenazados por actividades de madereo, estaba organizada por el Frente, junto a comunidades locales de Osa, organizaciones campesinas y el Comité de Vigilancia de los Recursos Naturales.
Algunos medios de prensa registraron de qué forma los guardias atacaron a los manifestantes, en su mayoría mujeres y niños, que distribuían panfletos a los automovilistas. Cuatro personas fueron detenidas y conducidas con rumbo desconocido. Ante este hecho ilegal y violatorio de los Derechos Humanos, los manifestantes decidieron bloquear la carretera hasta que, dos horas más tarde, los detenidos fueron devueltos al grupo. Cecilia Solano, dirigente comunal de Osa, manifestó: “Estamos haciendo uso de nuestro legítimo derecho de manifestarnos para defender los bosques de nuestro país. Los bosques son asunto de todos los habitantes del Planeta, defenderlos es un derecho humano. Cualquier intento de reprimir estas acciones es una clara violación a nuestros derechos humanos”. El día 22 de febrero las organizaciones convocantes dirigieron una carta a la Vice-Presidenta de la República y Ministra de Ambiente y Energía, Sra. Elizabeth Odio, expresándole su preocupación por la grave situación e instándola a tomar cartas en el asunto.
Las autoridades están tratando de implicar a los organizadores en acciones violentas contra la Guardia Nacional, ocurridas hace algún tiempo en la localidad de Rancho Quemado en Osa. Tanto las comunidades de Osa como el Frente, que comenzaron a actuar en junio de 1998 en vista de la muerte anunciada de los bosques de la zona, rechazan tal acusación y reclaman que el gobierno tome medidas para proteger los bosques húmedos del Pacífico costarricense. Por el contrario su postura es propositiva, habiendo ya presentado una serie de demandas entre las que se destacan: la revisión de todos los planes de manejo aprobados a fin de determinar su verdadero impacto ambiental; el establecimiento de un organismo neutral de contralor forestal; la asignación del presupuesto completo recaudado por el impuesto a los hidrocarburos, para apoyar el Programa de Servicios Ambientales, que permitiría pagar incentivos por conservación del bosque a los pequeños propietarios; la eliminación de los incentivos al “manejo forestal” que permite la tala del 40% del bosque y está destinada a las grandes empresas.
La página web ofrece información y fotografías sobre la campaña en pro de los bosques de Osa y sobre el mencionado incidente.
Por más información sírvanse contactar a:
Luis Diego Marín o María Elena Fournier.