La Corporación Financiera Internacional es el miembro del Grupo del Banco Mundial que otorga préstamos directamente al sector privado o compra acciones de empresas del sector privado que actúan en países en desarrollo. Pero la misión declarada de la CFI va más allá de ayudar a generar ganancias para las empresas del sector privado y sus accionistas. De acuerdo con su declaración de objetivos, la CFI existe para reducir la pobreza y mejorar la vida de las personas a través del desarrollo sustentable del sector privado.
Junto a la CFI trabaja el Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones (OMGI o MIGA, por su sigla en inglés), que brinda un seguro contra riesgos políticos y comerciales a las empresas que actúan en países en desarrollo, economías en transición o mercados emergentes (elija el eufemismo que prefiera).
En la actualidad la CFI tiene una cartera de compromisos de cerca de US$ 18 mil millones, pero su papel en la distribución de préstamos de bancos privados para infraestructura, desarrollo petrolero y otros sectores hace crecer su influencia mucho más allá de sus inversiones propias.
LaPolítica Operacional sobre Bosques de2002 (OP 4.36) del Banco Mundial solamente se aplica a las operaciones del Banco en el sector público, esto es, cuando el Banco hace préstamos a los gobiernos.No se aplica a la CFI ni al OMGI. Pero la OP 4.36, un documento breve que establece directrices obligatorias, viene acompañado de un documento de Estrategia Forestal que lo abarca todo y es de aplicación enteramente voluntaria. Este documento de estrategia, que también fue adoptado por la CFI, hace un llamado a un gran aumento de la inversión privada en el sector forestal, que la CFI y el OMGI se encargarían de movilizar. Según la Estrategia Forestal, el OMGI tendría un papel más importante en los bosques gracias a su capacidad de asegurar a los inversores privados contra riesgos políticos y catástrofes.De esto surge una pregunta obvia: ¿cómo es posible conciliar el objetivo central del Banco, es decir la reducción de la pobreza mediante el manejo sustentable de los bosques, con el apoyo que brinda a este tipo de inversiones forestales de alto riesgo, en las que el sector privado tiene como amortiguador al dinero público mientras los ecosistemas y los pueblos que dependen de los bosques pagan el precio de planes mal hechos?
Lo que sí se aplica a la CFI es una Política Operacional sobre Bosques de 1998 (OP 4.36, análoga a la política previa de 1993 del Banco Mundial) que en teoría es obligatoria. Entre las disposiciones de esta política se cuentan la prohibición de financiación directa de actividades de madereo o la compra de equipamiento para madereo en bosques tropicales húmedos primarios, la promoción de la participación activa de las poblaciones locales en el manejo sustentable a largo plazo de los bosques y la exigencia de realizar evaluaciones ambientales y sociales de los bosques que están siendo considerados para uso comercial. Si se aplicara plenamente, esta política contribuiría a resolver en forma más amplia los problemas relativos a la sustentabilidad ecológica y el respeto a los derechos de los Pueblos Indígenas y las comunidades que dependen de los bosques.
Pero la lista actual de los proyectos que están siendo preparados por la CFI parece indicar que la CFI actúa en un vacío político a pesar de la naturaleza (en teoría) obligatoria de las políticas de salvaguardia, entre las que se incluye la Política Operacional 4.36 sobre Bosques. Para ninguno de los proyectos de esta lista que se relacionan con los bosques se exige una evaluación completa. Todos aparecen como proyectos de Categoría B, para los que en general se considera suficiente una simple evaluación documental:
India - AP Paper Mills préstamo de $ 35 millones + $ 5 millones en participación (aprobado el 6 de julio de 2004)
China - Chenming Corporation Pulp & Paper - $ 75 millones
China - Krono Beijing- Wood Panels - $ 21,69 millones
Brazil - Aracuz Cellulose- $ 50 millones
Chile - Sociedad Inversora Forestal S.A. – $6,5 millones
Uruguay - Pulp and Paper Metsä Botnia –$ 100 millones
Federación Rusa - Kronospan Wood Panels –$ 70 millones
Esta breve lista de proyectos en curso apenas si rasca la superficie. No nos dice nada sobre las inversiones actuales en el sector forestal, de cientos de miles de dólares. Además, es probable que las inversiones de la CFI en industrias extractivas, infraestructura en gran escala, agronegocios, etc., tengan en muchos casos impactos importantes sobre los bosques y los pueblos que dependen de los bosques. La lista más reciente de la CFI incluye inversiones en energía hidráulica en India, gas en Bolivia y centrales de energía a carbón en Filipinas: ninguna figura como proyecto de categoría A y por lo tanto no se exige un estudio ambiental completo. Además, un tercio de los fondos de la CFI sirve para dar respaldo a bancos y otros intermediarios financieros. Por ejemplo, en esta última lista de proyectos de la CFI figura un préstamo de US$ 40 millones al Banco Agro Industrial de Exportaciones (Banex) deCosta Rica para expandir los agronegocios orientados a la exportación. Con relación a los impactos ambientales y sociales de este tipo de préstamo, hay muy poca transparencia, una vez más, en cuanto al modo de dar cuenta de los mismos, evitarlos o mitigarlos.
Actualmente la CFI está revisando tanto sus políticas ambientales y sociales como su publicidad de información de las mismas. Según la descripción de la CFI, la revisión es parte de sus esfuerzos por integrar plenamente la sustentabilidad a todas sus actividades mercantiles. Las ONG temen que la CFI esté pensando en sustituir las políticas de salvaguardia obligatorias, en virtud de las cuales puede exigírsele responsabilidad, por normas de desempeño casi voluntarias. Las ONG de todo el mundo piden normas claras y aplicables para los préstamos de la CFI y las reformas institucionales necesarias para garantizar su instrumentación. Las inversiones de la CFI en forestación e industrias extractivas son un recordatorio de la necesidad de controles y evaluaciones transparentes de las empresas que se benefician con el apoyo de la CFI y de una rendición de cuentas efectiva ante las comunidades afectadas y la población general.
Por Korinna Horta, Environmental Defense, correo-e: khorta@environmentaldefense.org , http://www.environmentaldefense.org