La noticia de la liberación, el pasado 9 de setiembre, de 20 jóvenes Ogonis que estaban detenidos sin cargo desde 1994, constituye una esperanza de reconciliación y paz en el Delta del Níger, región que ha estado presa del abuso de poder y el saqueo. Las tierras, las aguas y la atmósfera del Delta han sufrido y continúan sufriendo los abusos perpetrados por una fuerza de ocupación, conocida oficialmente como Rivers State Internal Security Task Force. La población local ha sido perjudicada por los efectos adversos de la exploración, la explotación y el transporte de petróleo, que ha perjudicado notoriamente su ambiente y sus medios de vida. El gobierno dictatorial de Nigeria ha defendido siempre los intereses de los gigantes petroleros --Shell, Chevron, Agip, Elf, Texaco, Mobil-- que siguen destruyendo los medios de vida y el ambiente de los habitantes del Delta, persiguiendo su mero provecho (ver Boletín del WRM nro. 10). Las compañías petroleras disfrutan de la protección adecuada para desatender las medidas de seguridad, a la vez que las respuestas populares son rápidamente acalladas con ayuda de la represión del aparato estatal. Esta incluye también la propaganda contraria a los pueblos indígenas de la región, injustamente tachados de subversivos y peligrosos. De ese modo, los Ogonis han venido siendo reprimidos para defender los intereses de la Shell, en tanto los Ilaje del Estado Ondo han sufrido represión en beneficio de la Chevron.
Fuente: Environmental Rights Action/ Amigos de la Tierra-Nigeria.