La novena reunión de la Conferencia de las Partes (COP 9) de la Convención sobre Diversidad Biológica se está llevando a cabo en Bonn, Alemania, del 19 al 30 de mayo de 2008. La COP 9 incluye un segmento ministerial a alto nivel organizado por el país anfitrión en consulta con la Secretaría y la Mesa (del 28 al 30 de mayo). La Cuarta reunión de la Conferencia de las Partes actuando como Reunión de las Partes del Protocolo de Cartagena sobre Bioseguridad (COP-MOP 4) se llevó a cabo también en Bonn, del 12 al 16 de mayo de 2008. Muchas organizaciones del mundo darán un mensaje claro contra la expansión de los monocultivos de árboles, los agrocombustibles y los árboles transgénicos.
De nuestra consideración:
L@s abajo firmantes deseamos hacerles llegar nuestra preocupación acerca de los impactos de los monocultivos de árboles a gran escala sobre la biodiversidad del planeta, a lo que se agrega la más reciente amenaza de las investigaciones que se están llevando cabo en muchos países sobre árboles transgénicos. En consecuencia, queremos realizar un llamado para que se adopten al respecto medidas concretas durante la Novena Conferencia de las Partes de la CDB en Bonn.
Primeramente deseamos enfatizar que, a pesar de que los monocultivos de árboles a gran escala resultan en graves impactos sociales y mbientales –y en particular sobre la biodiversidad en áreas boscosas- oficialmente se los sigue definiendo como “bosques” e incluyéndolos como sinónimo de “cobertura forestal”. Es por ello imperioso que la CDB –como organismo especializado en la conservación de la biodiversidad- realice una clara diferenciación entre bosques y monocultivos de árboles y que adopte una definición de bosques que excluya a los monocultivos de árboles como tales.
Al mismo tiempo, la CDB debería hacer esfuerzos para que se distingan claramente los beneficios sociales y ambientales derivados de los bosques y que se reconozcan los perjuicios que los monocultivos de árboles implican para las comunidades locales y la biodiversidad del planeta.
La CDB también debería reconocer los graves impactos sobre la biodiversidad de los monocultivos a gran escala destinados a la producción de agrocombustibles y poner límites a su expansión. Debería además declarar una moratoria inmediata a todo apoyo político, técnico y financiero para su producción. En este rubro se incluyen tanto monocultivos para la producción de biodiesel (palma aceitera, soja, girasol, jatrofa, etc.) como para la obtención de etanol (álamos, sauces, eucaliptos, caña de azúcar, maíz, etc.) y otros combustibles a partir de biomasa. También deberá reconocer el aumento del uso de agroquímicos y su impacto en la salud de la gente y el ambiente.
Asimismo, la CDB debe prohibir la liberación de árboles genéticamente modificados --incluyendo los ensayos de campo-- que no sólo implicarían la consolidación del modelo de destrucción de la biodiversidad resultante de los monocultivos de árboles, sino que incrementarían sus impactos y agregarían nuevas amenazas para la biodiversidad. El uso de árboles transgénicos agravaría aún más los impactos ya constatados sobre la biodiversidad, el agua, la tierra, los bosques y las comunidades que de ellos dependen y podrían desatar catástrofes ecológicas a nivel de las cadenas tróficas de los bosques.
El uso de tecnologías peligrosas como las “terminator”, presentadas como una solución frente a la posible contaminación genética de los bosques, resultarían en el agravamiento del problema, pudiendo resultar en la desaparición de numerosas especies asociadas a la floración y fructificación de los árboles.
En resumen, solicitamos a l@s miembros de la CBD a que adopten medidas que aseguren que:
- los monocultivos de árboles sean excluidos de la definición de bosques
- se suprima todo tipo de apoyo político, técnico y financiero a los monocultivos para agrocombustibles debido a su impacto directo en la biodiversidad y soberanía alimentaria
- que se prohíba la liberación de árboles transgénicos y el uso de la tecnología “terminator”.