Artículos del boletín

A fines del año pasado, cerca de 40 hombres de la etnia Hmong de Ban Phou Khao Khouay marcharon hacia el sitio de la represa Nam Mang 3 armados con palos y pistolas, y exigieron hablar con los funcionarios encargados del proyecto. Los pobladores estaban furiosos por la perspectiva de ser desalojados de sus tierras a causa del proyecto y no haber recibido todavía información sobre dónde serían reubicados, cuándo se produciría el traslado o qué tipo de compensación recibirían.
Advance Agro, una de las compañías de celulosa y papel más grandes de Tailandia, comercializa su tipo de papel "Doble A" como "amigable" con el medio ambiente. La publicidad de la compañía explica que la materia prima proviene de plantaciones y por lo tanto alivia la presión ejercida sobre las zonas de bosque que todavía existen.
Miles de hectáreas de selva fueron arrasadas por las llamas en una serie de incendios forestales que se extendieron de forma incontrolada durante los meses de marzo y abril en la Reserva de la Biosfera Maya, al norte de Guatemala. Los fuegos alcanzaron el Parque Nacional Tikal, declarado Patrimonio de la Humanidad por UNESCO, aunque pudieron ser controlados antes de afectar gravemente al área.
Los días 13, 14 y 15 de abril, y coincidente con la celebración del 1er Centenario de la República de Panamá, el Pueblo Kuna siente que sus derechos ancestrales todavía no han sido aceptados ni contemplados por una gran parte de la sociedad panameña. Se reunieron y se expresaron de la siguiente manera:
Los árboles transgénicos representan una amenaza mundial para los bosques y la diversidad biológica en su conjunto. Rasgos tales como la resistencia a herbicidas, la producción de insecticida, el crecimiento rápido y un bajo contenido de lignina, en combinación con la incapacidad de mantener la esterilidad prácticamente aseguran la devastación de los ecosistemas de bosque.
Una carta con más de 50 firmas de ONGs, iglesias, movimientos y sindicatos brasileños fue enviada a los inversores del Fondo Prototipo de Carbono (FPC) del Banco Mundial el 26 de marzo de 2003, exhortándoles a no comprar créditos de carbono provenientes del controvertido proyecto Plantar en Minas Gerais, Brasil.
Esta época de procesos cada vez más acelerados en ancas del desarrollo tecnológico también es escenario de una pérdida igualmente vertiginosa de los recursos naturales por su sobreexplotación para hacer posible un modo de producción, consumo y vida que cierra el círculo vicioso.
En casi todos los países los monocultivos de árboles a gran escala se han impuesto y desarrollado una vez que se ha logrado modificar las leyes de cada país de tal forma que empresarios nacionales y extranjeros obtienen todo tipo de beneficios, subsidios directos e indirectos, exenciones impositivas y hasta créditos blandos y reintegros por plantaciones a gran escala.
Las empresas madereras han sido advertidas acerca de la existencia de personas que les presentan documentación que aparenta tener la aprobación de tribus y gobiernos provinciales. La advertencia proviene de Ray Mano, ex presidente del Consejo de Area de West Big Ngela, quien afirmó que esa situación es generalizada entre los titulares de permisos de madereo de Ngela. Explicó que esto se hizo público recientemente, cuando una o dos personas fueron persuadidas con engaño a firmar documentos que permitían realizar operaciones de madereo en territorios tribales.
¿Alguien podría imaginar que los teléfonos celulares están manchados de la sangre de 3,5 millones de muertos desde 1998? ¿Y que lo mismo ocurre con los video juegos infantiles? ¿Y que las megatecnologías contribuyen a la depredación de los bosques y a expoliar los ricos recursos naturales de pueblos paradójicamente empobrecidos?
Tiomin Kenya Limited, una subsidiaria de la compañía Tiomin Resources Inc. de Canadá, comenzó a explorar las arenas minerales de la costa keniata en busca de titanio (ver Boletín del WRM N° 38). Con una longitud de 402 kilómetros, esta zona es una cultura tropical única con arquitectura árabe antigua, arrecifes de coral y ecosistemas frágiles.
El 31 de marzo, en el puerto italiano de Ravenna, los activistas de Greenpeace denunciaron la existencia de un cargamento de "madera de conflicto" de bosque tropical húmedo, término definido por la ONG Global Witness con sede en Gran Bretaña como "madera comerciada en algún punto de la cadena de custodia por grupos armados, sean facciones rebeldes, soldados del ejército regular o la administración civil, ya sea para perpetuar el conflicto o para aprovechar las situaciones de conflicto con el objetivo de obtener ganancias personales".