Artículos del boletín

El 7 y 8 de diciembre de 2011 tuvo lugar un encuentro en la ciudad amazónica de Cobija, Bolivia, para analizar la condición de los derechos de los pueblos indígenas en aislamiento y en situación de extrema vulnerabilidad de la Amazonía y el Gran Chaco, y establecer un plan de acción en torno a su defensa.
Con motivo del 15º aniversario del Instituto de Estudios Ecologistas del Tercer Mundo y en homenaje a Ricardo Carrere (quien hasta diciembre de 2010 fue coordinador del WRM), se realizaron en la ciudad de Quito, Ecuador, las “Jornadas de Pensamiento Ecologista, Ricardo Carrere” (*).
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) declaró a este año 2011, Año Internacional de los Bosques. Considerando que este año se termina, es bueno hacer un breve balance.
Para el WRM, la lucha de las mujeres es una lucha por libertad y justicia social. Esencialmente, es una demanda por cambios en las estructuras sociales que han ubicado a la mujer en una posición desigual y subordinada.
Una vez más, los contaminadores del mundo han bloqueado toda acción real para enfrentar el cambio climático. La 17ª Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (UN COP17) terminó en Durban con el lanzamiento de una nueva ronda de negociaciones (la Plataforma de Durban) destinada a establecer un nuevo régimen.
En este mes, en que se conmemora el Día Internacional de los Derechos Humanos, es imperioso destacar los casos de dos comunidades de países aparentemente muy distantes pero que tienen mucho en común. Tanto en Honduras como en la India, las comunidades llevan años de lucha contra el nuevo colonialismo de poderosos grupos económicos vinculados a la plantación de palma aceitera y a la extracción de hierro, respectivamente.
Un nuevo informe, publicado en noviembre de 2011, expone cómo la policía local de la provincia de Jambi, en la isla indonesia de Sumatra, trabajando con el personal de las plantaciones de palma aceitera, sistemáticamente expulsó a los habitantes de tres aldeas, disparando armas para asustarlos y usó luego maquinaria pesada para destruir sus casas y arrasar los pisos de hormigón que luego fueron arrojados en los arroyos vecinos. Esas operaciones fueron realizadas durante una semana, a mediados de agosto, y ya han desencadenado una controversia internacional.
La aplicación de la política nacional en materia de REDD+ en Tailandia representa para las comunidades indígenas una grave violación de sus derechos humanos. Con el argumento de que contribuyen a la crisis climática porque deforestan, destruyen los recursos naturales y causan incendios forestales - actividades todas que provocan emisiones de carbono -, las comunidades viven la amenaza constante de ser expulsadas de sus territorios tradicionales. Por otro lado, este tipo de análisis usado como base para la formulación de las políticas no suele contemplar la consulta a las comunidades.
¿Qué habría que esperar de la 17ª Conferencia de las Partes sobre el clima en Durban?
Los seres humanos han utilizado la biomasa para producir energía desde tiempos inmemoriales de forma sostenible. Por otro lado, la industrialización está terminando con las reservas de combustibles fósiles y ésta es la causa de la búsqueda frenética de otras fuentes de energía. Las bioenergías se basan en la producción de energía a partir de materia viva, la biomasa. La biomasa es materia viva como árboles, arbustos, hierbas, granos, algas, microbios y también residuos vegetales.
La multinacional estatal sueca Vattenfall es el quinto productor de energía en Europa. Su filial Vattenfall Europe, con sede en Berlín, es una de las cuatro grandes empresas en el mercado energético alemán. En este país, la producción energética de Vattenfall depende principalmente del carbón (65%) - con minas propias de lignito en el este de Alemania- y uranio (26%). Pero la empresa también apuesta a fuentes de energía supuestamente limpias, como la madera.
Un nuevo ciclo de expansión: plantaciones para carbono y biomasa