Artículos del boletín

En la década del 90, el gobierno de Camboya, con el respaldo del Banco Mundial, intentó promover el cultivo industrial en gran escala de camarones en la zona costera del país. En 1993, el Proyecto de Acción por los Manglares (MAP, por sus siglas en inglés), ayudó a impedir que la gigante agroindustrial tailandesa Charoen Pokphand, se instalara en las costas de manglares de Camboya, en donde llevaría a cabo un proyecto de cultivo del camarón tigre negro.
El madereo descontrolado en el estado de Sarawak, en Malasia, ha sido motivo de gran preocupación para los ambientalistas desde mediados de la década del 80. El tema cobró importancia internacional en 1987, cuando a los indígenas Dayak se les agotó la paciencia después de décadas de haber reclamado infructuosamente el reconocimiento de sus derechos a la tierra. Los Dayak erigieron barricadas a lo largo de los caminos de la compañía maderera para impedir la destrucción de sus bosques.
Los megaproyectos de construcción de represas en Tailandia fueron enfrentados con multitudinarias protestas por sus impactos negativos tanto en lo social como en lo ambiental. Los casos de la represa Pak Mun (ver Boletín 22 del WRM y nuevo artículo en este número) y la represa Rasi Salai (ver Boletín 27 del WRM), son quizás los más notorios, aunque no los únicos. Tailandia intenta ahora exportar ese modelo destructivo a su vecino Myanmar (ex Birmania).
La represa Pak Mun, en la Provincia Ubon Ratchathani, en el noreste de Tailandia, ha sido firmemente resistida por los aldeanos locales, quienes sufren sus efectos negativos que se manifiestan en la escasez de agua potable, la reducción del número de peces, los peligros para la salud, la inundación de sus tierras y el reasentamiento forzoso (ver Boletín 22 del WRM).
Honduras tiene la obligación, tanto por las leyes nacionales como internacionales, de proteger 75.000 hectáreas de humedales en el Golfo de Fonseca. En mayo de 1999, en la Convención de RAMSAR sobre Humedales y a través de la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente (SERNA), el gobierno hondureño obtuvo para los Humedales Costeros del Golfo de Fonseca la designación de “Sitio 1000 de RAMSAR”.
Hace 500 años, conquistadores portugueses en brillantes armaduras utilizaron sus armas modernas contra pueblos indígenas armados con arco y flecha. Ahora, policías en brillante vestimenta anti-motines utilizaron sus modernas armas contra personas desarmadas, incluyendo indígenas, negros y blancos, quienes protestaban contra los festejos oficiales de la llegada de los portugueses en el año 1500. Las fotografías no requieren de explicación. ¿El motivo? Nuevamente "los indios".
Al sur de Chile, en la comuna de San Juan de la Costa, cercana a Osorno se encuentra el fundo Huitrapulli. Se trata de aproximadamente 20.000 hectáreas cubiertas de bosques siempreverdes habitados desde tiempos ancestrales por comunidades Mapuche-huilliche. El lugar es parte de una de las áreas prioritarias para la conservación a nivel mundial, los extensos bosques valdivianos que se desarrollan en esa zona de la Cordillera de la Costa corresponden a una de las últimas reservas no fragmentadas de bosque templado a nivel mundial.
Entre el 15 y el 21 de marzo del 2000 una Misión Internacional, convocada por las principales autoridades de los pueblos indígenas Embera-Katio y U'wa, visitaron Colombia con la finalidad de observar a campo su situación respecto del prolongado conflicto que sostienen en defensa de sus derechos territoriales y culturales.
El cultivo comercial de palmito se inició en el Ecuador en 1987 y desde entonces, su expansión ha sido constante, convirtiéndose en un nuevo producto de exportación. El palmito se obtiene de la parte central y tierna de varias palmas. El "chontaduro" (Bactris gasipaes), especie nativa del Ecuador, es la más cultivada en el país para este fin.
Smurfit Cartón, subsidiaria de Jefferson Smurfit, es dueña de 34.000 hectáreas de monocultivos de gmelina, eucaliptos y pinos en los estados venezolanos de Portuguesa, Lara y Cojedes. De éstas, 27.000 hectáreas se encuentran localizadas en Portuguesa, donde la empresa se ha visto enfrentada a las comunidades de Morador y Tierra Buena, que resistieron la invasión de plantaciones forestales en sus tierras de cultivo (ver Boletines 18, 20, 22 y 23 del WRM).
El nuevo gobierno de Aotearoa -una coalición apoyada por los Verdes- ha prohibido la corta de las hayas nativas (y probablemente suceda pronto otro tanto con el rimu y otras especies), dada la enorme presión que se está ejerciendo sobre los remanentes de bosques en el país, que incluyen el bosque templado húmedo y el bosque templado seco.
En el Documento Informativo de la Campaña sobre Plantaciones "El mercado del carbono: sembrando más problemas" se deslizó un error: En la página 23, primer renglón, donde dice: "...la deforestación no debería..." debe decir: "...la forestación no debería..."