Artículos del boletín

La ciudad de Esquel, se encuentra enclavada sobre las márgenes del Arroyo Esquel entre cerros cuyas faldas forman un imponente anfiteatro, realzado por bosques marginales de la región de los bosques subantárticos y en particular de la llamada selva Valdiviana, en la Provincia de Chubut, al Oeste de la Patagonia Argentina.
Un grupo de siete investigadores evaluó las certificaciones de la empresa V&M Florestal Ltda. (Vallourec & Mannesman), que en 1999 obtuvo la certificación del FSC para toda su área de 235.886 hectáreas, a través de la certificadora SGS, como asimismo las de Plantar Reflorestamentos S.A., que recibió la certificación de SCS por un área de 13.287 hectáreas. Con dicha certificación, V&M Florestal se convirtió en la empresa con más área certificada en el Brasil.
El Pueblo Mapuche en Chile lleva años de lucha contra las empresas forestales nacionales y transnacionales y contra el Estado por recuperar sus tierras. El avance de la invasión forestal de monocultivos de árboles en la VIII, IX y X Regiones, donde la población mapuche supera los 337.000 habitantes trae consigo el etnocidio territorial Mapuche. La falta de tierras, la destrucción cultural y ambiental en el ecosistema de las comunidades colindantes con las plantaciones, hace que muchos se levanten en su autodefensa.
En Uruguay, todos los bosques están protegidos por ley y su explotación está prohibida, salvo que medie autorización expresa de los organismos encargados de velar por su conservación. Por lo tanto, la certificación es en este país una herramienta totalmente innecesaria para asegurar la conservación de los bosques. Sin embargo, basta entrar a la "lista de bosques certificados " de la página web del FSC para descubrir que existen 75.000 hectáreas de "bosques" certificados en el país.
Preolenna, en el noroeste de Tasmania, ha cambiado radicalmente con relación a lo que solía ser hace apenas cinco años (ver Boletín N° 36 del WRM). Según el plan del Gobierno Federal denominado Plantations 2020 Vision ( http://www.plantations2020.com.au ), esta comunidad que supo ser agrícola ha visto cómo sus predios rurales que solían proveer alimento a la gente han sido convertidos para proveer madera a las fábricas de astillas.
Los propietarios de las tierras tradicionales de Maisin y Wanigela, en el área de Collingwood Bay en la Provincia Oro, tienen mucho para celebrar.
La conservación de los bosques del mundo requiere de la adopción de una serie de medidas que impliquen un cambio de rumbo al actual modelo de destrucción. Dado que las causas directas de degradación de los bosques como las indirectas ya han sido claramente identificadas, el siguiente paso consiste en tomar las medidas necesarias para su remoción.
Además del boletín electrónico mensual, otra herramienta utilizada por el WRM para el apoyo y difusión de los temas en los cuales centra sus actividades, es la página web: http://www.wrm.org.uy En la sección "Información por tema" se pueden encontrar numerosas categorías, entre ellas la de Manejo Comunitario de Bosques. Allí incluimos todos los artículos publicados en el boletín del WRM sobre este tema, además de otros documentos de interés, así como enlaces a otras páginas relacionadas con este tipo de manejo.
En mayo de 2002, un grupo de participantes de la 4ta. Reunión Preparatoria para la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Sustentable (CMDS) de Johannesburgo, decidieron agruparse bajo una bandera común para ejercer influencia sobre los delegados gubernamentales acerca la necesidad de reconocer el manejo comunitario e indígena de los bosques como una herramienta viable para mitigar la pobreza y conservar el medio ambiente del planeta.
Para que los pobladores locales tengan confianza en que percibirán los beneficios de sus esfuerzos, el manejo comunitario de bosques requiere la tenencia segura de la tierra. El mapeo comunitario puede ser una herramienta poderosa para ayudar a las comunidades a considerar el tema de sus tierras, representar su sistema de uso de la tierra y hacer valer sus derechos sobre los bosques cuyo control procuran asegurar.
En Guatemala a pesar de que el 20% de las regiones boscosas se encuentra bajo sistemas en áreas protegidas, el continuo avance de la frontera agrícola producto de la distribución desigual de los medios de producción --especialmente tierra-- han dejado como secuela pobreza y exclusión social. Esta situación se agrava en zonas rurales donde la mayoría de la población depende de bosques.
Al parecer se está generando una importante corriente de apoyo para los bosques comunitarios, a juzgar por el discurso del Banco Mundial, las Naciones Unidas y las ONGs de todo el mundo. Por ejemplo, el Objetivo 3: Meta 4 del Programa de Trabajo de los Bosques aprobado en la sexta conferencia de las partes del Convenio sobre Diversidad Biológica dice: "Permitir a las comunidades indígenas y locales desarrollar e instrumentar sistemas comunitarios adaptativos de manejo para conservar y hacer uso sustentable de la diversidad biológica de los bosques".