Artículos del boletín

La prospección y explotación de petróleo se encuentran entre las actividades más destructivas para las selvas tropicales del mundo y más perjudiciales para las comunidades que allí habitan. Es con satisfacción que anunciamos que, por fin, algo bueno ha sucedido en Ecuador. El Gobierno ha publicado sendos decretos donde se declara como área protegida a perpetuidad los territorios de Tegarei (773.200 hectáreas) y de la zona de Imuya en Cuyabeno (435.000 hectáreas).
La prospección y explotación de petróleo se encuentran entre las actividades más destructivas para las selvas tropicales del mundo y más perjudiciales para las comunidades que allí habitan. Es con satisfacción que anunciamos que, por fin, algo bueno ha sucedido en Ecuador. El Gobierno ha publicado sendos decretos donde se declara como área protegida a perpetuidad los territorios de Tegarei (773.200 hectáreas) y de la zona de Imuya en Cuyabeno (435.000 hectáreas).
La destrucción de la Amazonia está íntimamente ligada a la violencia que los pueblos indígenas y las comunidades locales han sufrido a lo largo de la historia a manos de los grandes terratenientes y con la conformidad de las autoridades. El 22 de febrero ppdo. la oficina europea del WRM envió sendas cartas a autoridades brasileñas expresando su preocupación por los asaltos y asesinatos que ocurrieron recientemente contra integrantes del pueblos indígena Macuxi en el estado de Roraima. La carta dice:
El pasado enero la Prof. Wangari Maathai, una de las más notorias ecofeministas y luchadoras por la democracia en Africa, y otros activistas keniatas fueron atacados por matones mientras manifestaban pacíficamente en las afueras de Nairobi contra la privatización del Bosque de Karura. El día 2 de febrero James Orengo, David Mwenje y John Makanga fueron arrestados por la policía. En la víspera el Presidente Moi se había pronunciado a favor de la privatización de dicha zona.
El 12 de enero de este año los Penans de Long Sayan y Long Belok construyeron barricadas en puntos estratégicos de la carretera para evitar que la empresa Lajung Lumber S.Bhd siguiera con la tala de sus bosques comunales, luego de que la misma se rehusara a escuchar sus demandas. En octubre de 1997 Lajung Lumber había firmado un acuerdo con los Penans para hacer cortas en áreas preestablecidas de sus bosques comunales.
Indonesia está sufriendo un acelerado proceso de plantación de palma aceitera. Se espera que la actual superficie de 3.200.000 hectáreas aumente a una tasa de 300.000 hectáreas anuales. Dado que estos monocultivos invaden territorios originalmente ocupados por bosques y generalmente habitados por pueblos indígenas y comunidades locales, su expansión consituye un significativo problema ambiental y social. Ya se han denunciado muchos casos de conflictos en relación con el uso del territorio y los recursos naturales (ver Boletines nros. 14 y 15 del WRM).
Las selvas de Indonesia sufren periódicamente incendios pavorosos. Entre 1982 y 1983 severos incendios destruyeron 3,5 millones de hectáreas de bosque en Kalimantan. Están todavía frescos en nuestra memoria los enormes fuegos que a fines de 1997 devastaron millones de hectáreas de bosques en ese país, con consecuencias que afectaron a la totalidad del Sudeste asiático.
Un grupo de redes de organizaciones de pueblos indígenas y ONGs de Indonesia está organizando el “Congreso de los Pueblos Indígenas del Archipiélago – Un desafió para las posiciones de los Pueblos Indígenas y del Estado”, que tendrá lugar entre el 15 y el 22 de marzo próximos en Jakarta, Indonesia.
Durante años organizaciones ambientalistas y de Derechos Humanos han criticado duramente a Freeport –una gigantesca compañía minera, con base en EE.UU.- debido a sus actividades contaminantes durante la extracción de cobre y oro en Irian Jaya (Indonesia) y en Bougainville y Ok Tedi (Papua Nueva Guinea). La empresa se vio también envuelta en casos de violencia en perjuicio de campesinos Ekari, con la complicidad de las autoridades (ver Boletines del WRM nros. 7 y 8).
En varios países del mundo se han generado conflictos entre la protección de los parques nacionales y la conservación de la vida silvestre por un lado, y la defensa de los derechos de los pueblos que viven en esas áreas por otro. El modelo hegemónico oficial de conservación tiene una visión de la naturaleza como compuesta por hermosos espacios, pero vacíos. Ignora que el uso sustentable que la mayoría de las comunidades locales hacen en estas zonas es la mejor garantía para la conservación. El problema es especialmente importante en países con una alta densidad de población rural.
Los manglares son humedades ricos en biodiversidad, que están sufriendo una depredación severa en todo el mundo. En Sri Lanka los manglares están asociados a 22 cuerpos de agua salobre, conocidas a nivel local como lagunas. Si bien la superficie ocupada por los manglares en todo el país no supera las 12.000 hectáreas, la misma es de un gran valor dado que alberga especies y asociaciones vegetales muy poco comunes, en diferentes zonas climáticas. Además la pesca en estas lagunas constituye el medio de vida para más de 120.000 habitantes de la costa.
En tiempos del Imperio, Japón invadió China para expandir su poder en el Lejano Oriente. Hoy en día, cuando los tiempos de guerra en esa región ya han pasado, un nuevo tipo de invasión amenaza al territorio chino: el de las plantaciones forestales asociadas a los Mecanismos de Desarrollo Limpio (CDM, por su sigla en inglés) bajo el Protocolo de Kyoto.